Corrupción, política y narcotráfico
Abstract
La opinión pública sostiene que la corrupción de los políticos es responsable de la decadencia de la
democracia y con este argumento defiende su desinterés hacia todo lo público. Ante este comportamiento
tan poco republicano, se busca la solución en legislaciones complejas que anulen las ventajas a las que
ilegítimamente podrían aspirar los funcionarios públicos.
Sin embargo, el resultado de este intrincado estado de derecho son instituciones que llenan a la democracia de promesas incumplidas, plantean la utopía de un poder controlado por la ley y despolitizan la
política. La reducción de la cosa pública a sus delimitaciones legales pretende sustituir el conflicto, característico del poder, y el consenso, característico de la política, por el derecho, característico de lo privado.

