dc.description.abstract | Mi experiencia en el largo camino
recorrido en docencia universitaria
y gestión académica, me
permite plantear algunas reflexiones que
hacen a nuestra preocupación con respecto
a la formación de los jóvenes que en
estos nuevos tiempos participan en la vida
universitaria aportando opinión. Es importante
destacar que ellos tienen un fluido
acercamiento con profesores y directivos en los que se expresan
con confianza y respeto; ese acercamiento, imposible en
otros tiempos, lo concretan personalmente, por email o por las
redes sociales.
Estas variadas modalidades nos han brindado la posibilidad
de conocer sus opiniones, sus referentes, sus sueños y, también,
sus celebraciones y afectos personales. Este hecho me
llevó alguna vez a preguntarles si sabían que yo los estaba
leyendo con mi diferencia generacional y mi cargo como directiva,
a lo que respondieron: “¡sí!, pero contamos lo que
nos pasa”. Ese día aprendí de la trasparencia de sus actos.
En estas comunicaciones, tienen una gran inmediatez y están
atentos a todo detalle, si se trata de un aniversario, allí
están, si se trata de alguna situación de riesgo social, de la
naturaleza o de la política, también están ofreciendo su solidaridad;
con estas actitudes nos vamos integrando a su comunicación,
escuchando y respondiendo a sus iniciativas.
Luego están las preguntas que buscan respuestas para formar
su propia opinión, cuando aspiran a seguir una carrera
universitaria y quieren definir su vocación, su capacitación y
su empleo en nuestro país y en el exterior; estas respuestas
se atienden cuidadosamente porque estos jóvenes, pese a
su condenatoria adolescencia tardía, están interesados en
aspectos de la futura vida universitaria que los constituirá
en protagonistas de un posible proyecto de país, que responda,
además, a la globalidad de nuestros tiempos. Entonces,
debemos orientarlos hacia una actitud activa para la obtención
de conocimientos, métodos y experiencias, y a la curiosidad,
que motiva el descubrimiento y se asocia a sus propias
modalidades de comunicación.
La tecnología informática es un nuevo instrumento que posibilita
descubrir el placer de la lectura con el uso de los medios
digitales, por eso hay que utilizarla como una modalidad
de aprendizaje y comunicación sin descuidar las posibilidades
que otras nos brindan.
Es importante comprender el rol de la familia en relación
con el estudiante universitario, ya que son quienes deben
acompañar al alumno cooperando con las instituciones en el
desarrollo del proyecto educativo. Hoy encontramos que esa
comunicación amigable de los jóvenes es compartida con
sus padres, quienes participan de convocatorias por premiaciones,
movilidad internacional o problemas personales del
familiar acompañando la opinión de los jóvenes, sin imposiciones
y con fluida comunicación.
Finalmente, si alguien dice por allí que los jóvenes universitarios
pecan de no leer diarios ni suficientes libros o de no
tomar nota de las lecciones, pensemos que el mundo ha
cambiado, que ellos nacieron y se desarrollan en la era digital
y están utilizando un modo de comunicación y de formación
de opinión compartida y trasparente que debemos aceptar y
a la que nos corresponde integrarnos.
Arquitecta Mónica Fernández
Decana de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo | es_ES |