| dc.description.abstract | La cuestión de la admisión a la universidad en nuestro país se ha convertido, de un modo difícilmente
explicable, en un tema excluido de la posibilidad de ser objeto de análisis y reflexión en virtud de que la
adopción del sistema de ingreso irrestricto o directo ha devenido en un dogma de características casi
religiosas, con sus muchos e inevitables profetas y pocos herejes. Sus profetas, como los de todo pensamiento estereotipado, no admiten evidencias contradictorias, mientras que los herejes son acusados indistintamente de ser economistas exponentes de corrientes monetaristas, o sociólogos y cientistas educativos relacionados con organismos de crédito internacional, o pertenecer al elitismo social y cultural ligado a
nostalgias autoritarias o ranciamente aristocráticas. | es_ES |