dc.description.abstract | Durante mucho tiempo, la víctima u ofendido por el delito estuvo excluida del proceso penal y
con gran razón se ha dicho que era la gran ausente.
Sin embargo ello no fue siempre así. Desde los primeros tiempos la venganza como el derecho
de la víctima, aparecía como forma de solucionar el conflicto. En estas sociedades primitivas la
ley vigente era conocida como Ley del Talión.
El surgimiento del Estado, los movimientos de codificación, implicaron un cambio en la
persecución del delito, saliendo de la esfera privada para pasar a manos del Estado, centrado
así en la idea que se afectaba un interés social o Estatal. En la época de la Inquisición, la
persecución del delito se monopoliza en manos del Estado, la persecución penal es ahora
pública en la que el delincuente pasa a ser el centro de atención, expropiando de toda
consideración y participación en el proceso a la víctima, transformando el sistema penal en un
instrumento de control social sobre los súbditos. | es_ES |